Y tal vez todo evolucione después.
Sólo tienes que dar unos pequeños pasos más. Sólo tienes que avanzar más. Con los ojos cerrados y las manos en los bolsillos. Evitando tocar la rabia y la impotencia. Un poco más. Sólo tienes que pasar por encima de la decepción y la tristeza. Sólo un poco más.
Y pronto volverás a sentir luz en el corazón.
A este laberinto poco le debe quedar.